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viernes, 30 de septiembre de 2011

El banquete de la cuestión del Ser o no Ser

Palabras indagan por el resquicio de los ojos del Gran Nach, cuales realzan su aristocracia por vestir y ser cosidas con agujas de inverosimilitud; después serían retales de énfasis.
Puedo curiosear sin certeza (dulce tentación de la imaginación) como en su cabeza hay un pensador, un filósofo, un poeta, una fusión de los tres anteriores. Sentado en un escritorio anticuado, con pluma de tinta china y papel. Retuerce sus cavilaciones para dar con la frase perfecta para la perfección (la cual se asusta, al verlo escribir). Sus yemas aprietan esa pluma deseosa de volar con las alas otorgadas por la dichosa inspiración.

Humano en soledad (dígase humano por tener saber).
En un comedor palaciego, de techos grotescos y ventanas a ambos lados. Un humano (tú), sentado en el extremo de una mesa inmensa, en la cual entrarían íntegramente los ángeles que caen del cielo.
Con las manos en los ojos y dando suspiros de desesperación (o a ella). En estos casos el dicho "arrancarte los pelos" puede estar presente, solo si tú lo deseas.
Buen provecho a mi. Pues comienza el "comedero de cabeza" por el cual todos sufrimos incontables veces en nuestras cortas vidas contrarias a las gatunas, pues perdemos la cuenta al empezar.
Cierra los ojos, aprieta fuerte y cierra el telón de tu Universo excluido e incomprendido del desastre - desgracia en el que reside tu cuerpo; pues la sociedad Maquiavélica e Hipócrita siempre despreciará a la ansiada Felicidad. Fieles perras rastreadoras que no dudarán en buscar defectos para jugar al "hundimiento sin piedad". Por ello, debes rozar sus pieles escondiendo el NO ser uno más. Sabiendo que Desconfianza te mira con su máscara para indagar.
Por ello soldados, debería ser IMposible vivir en un mundo así, pero hemos seguido a los cabritillos y abierto la puerta a los lobos, aún enseñando las zarpas que desgarran por debajo de la puerta hemos caído en sus fauces.

Exceptuando a aquellos que se escondieron en un reloj de pared, que salieron, vieron la luz y volvieron a caer. Arrodillados y con la desesperación a sus pies, asustados y sin saber qué hacer para caer bien.

Otra excepción son también los débiles que salen al mundo siendo más fuertes que la propia Fuerza. Quienes poseen más armas que en una infinitud de Guerras. Hay una "ley": "Una vez que veas la luz que ciega tu Universo, sobrevive en las calles, espero que nunca deje de sonar en tu cabeza y rebote en cada recoveco, SOBREVIVE".
Pues una sonrisa de un amigo es falsa y este deja de ser amigo. El amor es pasajero, nunca eterno. Confías en el traidor. Nunca tendrás alas ni serás libre, pues vives en una jaula. Los diarios hablan con voz propia...
Y lo más importante: El olvido no existe. Pero ama con locura al Rencor.
Todo esto se nos plantea en una mesa, en un plato y sin cubiertos. Desnudos somos ante el mundo, pero el mundo jamás debe de ver quién somos por dentro. JAMÁS.
Si quieres llamarlo "Ley del más fuerte" hazlo. Preferiría que vivieras en silencio y lo demostraras.
Comida rápida somos para lo voraz.

http://www.youtube.com/watch?v=VWoUcB7y4hw