Seguidores

domingo, 14 de octubre de 2012

Tan impredecible como la historia:

Vagando por las calles de una sombría ciudad otoñal que hoy se me antoja suculenta. Los árboles se estremecen como mi cuerpo, con una pequeña diferencia,  a ellos se les caen sus hojas mientras que a mi los sentimientos y con un parecido, no nos apetece arrastrarnos para sustentarlo con lo que nos pueda quedar de vida. El tiempo es tan efímero que no merece la pena perder un solo segundo por algo que se va de ti dejándote desnudo entre el Otoño. Procedo a cerrar los ojos, uno, dos, tres... suspiro y por último los abro, aunque no haya mucho que ver pues la vida ansía con dejarnos ciegos a merced de sus caprichos. 

Pero hay algo que sigue aquí, dentro de mi. Soy el invierno que pone todos los años a prueba  mi ánima y esta permanece aquí, abrigándome en días gélidos y escuchando mis pesadillas. Intentando llegar a un acuerdo con mi subconsciente y no consiguiendo nada, porque según él "lo hace sin querer". Las escusas no me valen, pero en este caso no hay nada que hacer. Una vez más, me siento tan impredecible como la historia, esperando paciente mis causas y temiendo las consecuencias. Pero aquí sigo, con las manos en los bolsillos esperando a que me sorprendas, pues mientras pululo por la ciudad tu estás ahí, te siento pero estoy segura de que cuando te tenga frente a mis ojos, no te reconozca. Porque has cambiado mucho desde la última vez. Estás irreconocible, increíblemente irreconocible. 

- Clavo mis ojos en ti y... veo mis propios ojos. ¿Por qué? Porque mi destino eres tú. Eres tan irreconocible como mi propia persona. A veces me miro y no sé quién soy. Pero cuando te veo a ti, quizá me equivoque, pero eres yo.

Juré y perjuré que esta vez no me engañarías, te sonreiría y tu sentirías la derrota. Pero me equivoqué, aunque errar sea de sabios me parece insaciable, porque parece que tengo sed de más y con una vez no me es suficiente. 
El mismo pez en su amado océano, que no sabe vivir fuera de él. 
Esta más que asumido, lo que aún no asumo es el temor de que un día huya de mi. ¿Seguirás aquí, haciéndome cosquillas y dejándome vivir? No necesito más oxígeno que el que tú quieras darme. 

 Myself."The fish"
Myocean. "The life"