Seguidores

domingo, 26 de septiembre de 2010


Perdí la noción.
Quizá sean sus pasos de bailarina, o la facilidad con que me enamora.
Pero soy esclavo, estoy atado a una rosa de espinas.
De pies y manos, cabeza y cuello.
Intentad separarme, os defraudaré. No puedo hacerlo, vosotros menos.
Estrujo mi cabeza para exprimir ideas claras, pero...nada sale de ella.
Me falla todo lo que me rodea, psicológicamente hablando.
Descanso en una cama a su lado y se rompe. La persigo hasta el lago mas cercano y la Tierra nos traga.
Te echaré de menos aun no habiendo estado contigo. Escribiré cartas a tu dirección, las cuales se perderán.
Todo lo que haga, acabará u bien olvidándose o perdiéndose. Éste, es el principio de mi tristeza y el fin de tu piel.